11 de noviembre de 2011

SIN TIEMPO PARA RECORDAR

Lejos del pueblo y de su casa, rodando montaña abajo, hacia el abismo negro de la noche, piensa por un instante en qué es lo que le ha llevado hasta allí, hasta el borde mismo de su memoria. Y no puede recordarlo, no tiene tiempo para recordarlo, mientras su cuerpo yace en lo hondo de hojas y helechos y zarzas, mirando, ciego, la vida que dejó en lo alto, en la curva que nunca tomó.

No hay comentarios:

Publicar un comentario