30 de mayo de 2011

RECUERDOS DESDE EL GALLINERO


No recuerda bien cuándo fue, pero no hay duda de que en los primeros años de universidad y en aquel viejo Teatro Calderón. No importó que nadie le acompañara aquella tarde; tampoco ver la ópera desde lo alto del gallinero. Era la primera vez que lo que tantas veces había oído en grabaciones, que lo que alguna vez había visto en la televisión, lo estuviera viendo y oyendo allí mismo, sintiendo cómo el aire vibraba agitado por la orquesta y la voz de los cantantes. "La Boheme", su primera ópera de verdad. Y sobre el escenario una buhardilla de bohemios en París, y calles y terrazas, alegría y penalidades de cualquier tiempo, y Mimi, Mimi.... Y de nuevo una buhardilla... y el corazón encogido sin poder evitarlo... y el final.

2 comentarios:

  1. No tengo duda de que tuvo que ser emocionante. Desde el gallinero, además, vista aérea de lo mejor.
    No he asistido aún a una ópera en directo, pero creo que, cuando lo haga, probablemente sea desde ese mismo sitio, aunque los tiempos de estudiante queden lejos.
    Besos

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  2. Pues sí, Aliana, fue ciertamente emocionante. Y lo del gallinero queda tan de estudiante y bohemio, y más viendo La Boheme, que no hubiera podido escoger mejor sitio.

    Después he vuelto a la ópera en varias ocasiones, pero ya nunca al gallinero; sí a los palcos, con la mala suerte de que en Berlín sólo a los de platea sirvieron champagne.jejeje

    Besos con partitura y libreto.

    Un beso.

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